La bruma de tu mañana
mar luminoso despejas
con los gemidos que claman
vaivenes de primavera
fundidos desde tu espalda
tu estuario liba mi delta
y en lírica tu garganta
exhala cantos de sirena
Arpegio con tu mirada
la penumbra que embelesa
abrazando tus olas calmas
besas mi húmeda tierra
de una noche larga
se destila un poema
Soles lejanos no exclaman
parecerse a las estrellas
Las fugaces se desgastan
en cola de propias penas
Si constelaciones apasionadas
el amarte dibuja en ti plena
y el besar los montes de tu mapa
siente como el universo se condensa
por que añorar fuegos artificiales
si en tu piel las galaxias son eternas...
Al incondicional ofrendarse
la confianza fluye en tus venas
como el río que en tu vientre yace
de lo mas puro de mi esencia...